Círculos restaurativos e inclusión en el ocio

Cristina Sabaté/ septiembre 17, 2019/ Noticias

Como cada año los monitores y monitoras de los Centros infantiles del Distrito y la Ludoteca trabajan para garantizar que sus espacios de ocio sean inclusivos y puedan acoger la diversidad de niños y niñas del distrito con ganas de jugar y pasar buenos ratos las tardes de entre semana .

Por normativa se reserva un 5% de las plazas a niños y niñas con discapacidad. Desde el Distrito se ofrece la dotación necesaria de monitores de apoyo y el Equipo de Asesoramiento y Orientación Psicopedagógica EAP Ciutat Vella asesora para garantizar una buena inclusión.

Cada año, los diferentes profesionales de estos servicios participan en una formación elegida entre todos. Este año la temática ha sido los Círculos restaurativos y la inclusión en el ocio.

El pasado 9 de septiembre, la cita tuvo lugar en el Casal de Barri Folch i Torres donde se profundizó en esta técnica de la mediación sobre diferentes fórmulas de aplicación.

La formación estuvo dirigida por Lola Montejo, mediadora y formadora en la aplicación de las prácticas restaurativas en centros de niños y jóvenes para la mejora de la convivencia y la resolución de conflictos y miembro del Equipo Tésera Mediación.

A partir del título “El enfoque restaurativo para la prevención y transformación de situaciones de conflicto en el ocio inclusivo”, se desarrolló un taller en donde se transmitieron los conceptos básicos sobre la inclusión de la diversidad, específicamente los niños y jóvenes con discapacidad, y sobre la mediación y las prácticas restaurativas.

Se pudieron poner en práctica los círculos preventivos que ayudan a mejorar las relaciones personales y a reforzar los vínculos, mediante la creación de “zonas de diálogo seguras” promoviendo la convivencia positiva y la creación de comunidad y posteriormente, los círculos restaurativos resolutivos que ayudan a resolver situaciones y / o conflictos centrados en las relaciones de convivencia y reparar el daño causado, en la medida de lo posible, creando comunidad y mejorando la comunicación y la participación de todas las personas afectadas por la situación.

La formación facilitó un espacio de encuentro donde reforzar vínculos entre profesionales de diferentes centros y espacios. El trabajo realizado durante la sesión hizo repensar las propias prácticas y proponer retos entre los participantes.

¡Un inicio de curso motivador!

Compartir esta entrada